Si tu flujo productivo está en expansión, si el proceso actual de tu final de línea es lento, si quieres reducir las bajas laborales o si no logras cumplir tus objetivos de sostenibilidad, ha llegado el momento en que dejes en el pasado los procesos manuales y automatices tu final de línea.

Primero de todo, ¿qué significa automatización industrial?

Se trata de reducir el trabajo que realizan las personas en los procesos de producción en el marco de iniciativas en las fábricas. Como regla general, las tareas de los trabajadores se limitan a supervisar las operaciones desde un panel de control.

¿Manual? No gracias.

En muchas empresas, hace tiempo, se destinaban pocos recursos al final de línea, con la consecuente decisión de escoger un equipo de trabajadores para enfardar o envolver manualmente las cargas paletizadas.

El enfardado es la operación por la que se aseguran las cargas sobre el palet mediante la utilización de film plástico estirable.

El enfardado se hace necesario para su manipulación y transporte, sobre todo para aquellos productos que requieren de una mayor protección contra agentes externos tales como los alimenticios o las materias primas que intervienen en su transformación.

El film plástico ejerce de barrera lateral reduciendo la entrada de polvo y otros agentes por los resquicios del embalaje. La operación de enfardado se realiza desplegando una bobina de film estirable y envolviendo con él la carga. Los procedimientos mecánicos por los que se envuelve la carga son variados, siendo la tendencia actual, la de mejorar la velocidad y la eficacia de los automatismos.

Principales problemas de los procesos manuales

Actualmente, los modelos automáticos más avanzados que sustituyen los procesos manuales son las enfardadoras o envolvedoras de anillo, capaces de alcanzar velocidades superiores a 150 palets/hora frente a los equipos de brazo rotativo que se destinan a producciones medias y los de base rotativa que hacen girar el palet, con el riesgo de desplazar la carga.

¿Os imagináis, hoy en día, cuatro o cinco empleados envolviendo a mano unas cargas destinadas a un sistema logístico más y más exigente? Exacto, es impensable.

Enumeramos algunos de los problemas frecuentes ocasionados por procesos manuales:

1. Cargas poco o nada estables con el consiguiente consumo excesivo de consumible: todo enfardado manual, por muy profesional que sea, nunca podrá optimizar la relación entre estabilidad la carga, y un reducido consumo de film.
2. Costos elevados, lesiones o accidentes laborales: Los trabajadores de la fábrica deberán encargarse de envolver las cargas una por una. El método manual es más lento, costoso y puede provocar más malestares físicos.
3. Imagen de la empresa perjudicada por el acabado final: puede pasar que te rechacen lotes de tus productos por un aspecto nefasto, que puede derivar de un enfardado manual poco estable que hace que la manipulación sea peligrosa, desmoronándose en el camión o durante la carga y/o descarga, generando una insatisfacción del cliente y la pérdida de fidelidad.

La automatización del final de línea en la industria tiene muchos beneficios

Una envolvedora automática es una muy buena inversión que optimizará tus procesos y tu producción, y mejorará la imagen de su empresa y la salud de sus operarios.

Las enfardadoras o envolvedoras automáticas son aquellas que no necesitan ninguna intervención del operario durante el proceso de enfardado con film estirable y que están concebidas para optimizar el proceso de producción.

Juega un papel muy importante en la industria moderna: la enfardadora contribuye, en mayor o menor medida y según la calidad de la máquina, a:

1. Mejorar la eficiencia, ahorrar en el consumo de film: la automatización aumenta la velocidad de la producción, reduciendo los errores humanos y aumentando la eficiencia de los procesos. En comparación con los enfardados manuales, con las enfardadoras automáticas prácticamente no existen mermas de plástico, ya que las bobinas se aprovechan en su totalidad hasta que se agota el plástico.
2. Reducir costos: se reducen los costos de mano de obra, mejorando la eficiencia en la producción, resultando en una reducción significativa de los costos. Automatizar los procesos reduce los costes de personal un 60% en el empleo de enfardadoras semiautomáticas o un 90% en el uso de enfardadoras automáticas. Por no mencionar la mejora de las condiciones físicas y laborales de los operarios, ya que se reducen los esfuerzos físicos, aminorando los malestares físicos procedentes de enfardar un palet manualmente y reduciendo el absentismo por bajas. Se reducen casi totalmente, los costes por devoluciones y los gastos por repackaging.
3. Mejorar de la seguridad: se reducen los riesgos de lesiones laborales y se mejora la seguridad en el lugar de trabajo.
4. Mejorar la calidad: la automatización puede asegurar una mayor consistencia y precisión en la producción, mejorando de paso la calidad del acabado final de los productos. Una máquina de embalaje automática mejora la imagen de su empresa, ya que mejora el acabado del palet. La enfardadora o envolvedora aplica una película de film regular y uniforme, dejando el palet en perfectas condiciones. El mejor acabado lo consiguen aquellas enfardadoras que poseen de un sistema de corte y soldadura que evitan las tan molestas colas de film que tantos problemas ocasionan en los almacenes automáticos y en las ruedas de las carretillas.

Enfardadoras automática de anillo giratorio, una apuesta para la automatización del final de línea

Las enfardadoras automáticas de anillo giratorio de nuestro asociado Movitec pueden hacer eso y más:

• Fabricadas con componentes de probada eficacia y de fama mundial, calidad que alargará la vida útil de la máquina
• Máquinas diseñadas, construidas y programadas para un mantenimiento fácil con una red global de técnicos para ofrecer el mejor servicio.
• Ahorro significativo de film, gracias a su pree-estiro de hasta el 400% (es decir, un metro de film se estira hasta los cuatro metros), combinado con su excelente control de la tensión del film sobre la carga, que hace posible la aplicación de film muy fino, sin roturas.
• Flexibilidad de ciclos de envolvimiento, eligiendo a la carta el programa que más se adapta a tu carga, de forma automática.
• Cargas pequeñas, altas, de tamaño XL, con o sin palet, la gama de enfardadoras de Movitec se atreven con todo.

En resumen, la automatización de final de línea en la industria, eligiendo una enfardadora de buena calidad, con un film de buena calidad, tiene un impacto muy positivo en la eficiencia, calidad y seguridad, lo que puede ayudar a mejorar la competitividad y el éxito empresarial.